LA LINDE, 2-2014.
Resultados:
HABITAR UN ENTORNO ARQUEOLÓGICO
Laura Gea Martínez. Arquitecta
Proyecto final de Carrera de Arquitectura en la Universidad de Alicante.
Autora: Laura Gea Martínez, arquitecta especialista en proyectos de cooperación (europeos y de desarrollo en el tercer mundo).
Director Científico y Coordinador de las Excavaciones en el Tossal de les Basses: Pablo Rosser Limiñana.
LA PARALIZACIÓN DE LAS EXCAVACIONES SUPONE VOLVER A ENTERRAR LOS RESTOS COMO MEDIDA DE PROTECCIÓN, LO QUE REPERCUTE NEGATIVAMENTE EN EL DISFRUTE POR PARTE DE LA CIUDADANÍA
Es aquí donde aparece la oportunidad para desarrollar mi proyecto; plantear un sistema registrable de ocupación que permitiese la utilización del espacio a la vez que se realizan las excavaciones. El visitante podría disfrutar e interactuar con la excavación de forma gratuita, mientras que los ingresos generados con la realización de actividades culturales y comerciales tales como proyecciones, exhibiciones, conciertos, teatros o ferias, irían financiando la investigación arqueológica. El espacio así resultaría mucho más atractivo con una amplia oferta de ocio además de una visita arqueológica dinámica y cambiante según la evolución de los descubrimientos arqueológicos. A nivel de barrio, se podrían generar una serie de recorridos programados que conectaran los diferentes parques arqueológicos, y que fueran contando la historia de los primeros asentamientos humanos previos al emplazamiento actual de la ciudad de Alicante.
El sistema constructivo propuesto pretende ser un modelo aplicable a cualquiera de las situaciones localizadas en la Albufereta con la misma problemática pero, para el proyecto, desarrollé en detalle el yacimiento del Cerro de las Balsas.
ESTRUCTURAS QUE PERMITEN LA UTILIZACIÓN DEL ESPACIO A LA VEZ QUE SE REALIZAN LAS EXCAVACIONES: DISFRUTE E INTERACCIÓN DEL VISITANTE
El Cerro de las Balsas es uno de los bienes arqueológicos más importantes de la ciudad de Alicante puesto que en él se encuentra un poblado Ibérico, declarado Bien de Interés Cultural, además de cabañas neolíticas y de la Edad de Bronce, hornos, una villa romana y una necrópolis tardoantigua.
Me resultó atractivo también su pasado reciente, el siglo pasado cuando formaba parte de los tapices vegetales que conformaban la “Horta d’Alacant” y la imagen delicada de las primeras casas turísticas a pie de playa, construidas con madera y desmontadas cuando finalizaba la época estival.
El proyecto reinterpreta esta imagen para configurar un nuevo espacio de aspecto natural, pero en lugar de utilizar vegetación, dada su incompatibilidad con las ruinas; se emplean fibras vegetales como materiales de construcción, tales como el mimbre y la madera, que además poseen la cualidad de poderse curvar y tejer cuando están húmedos, propiedad que es experimentada en el proyecto a través de diferentes maquetas para generar formas orgánicas.
El yacimiento arqueológico está localizado en un estrato unos 2 metros por debajo del nivel de la ciudad construida y está limitado al este por un barranco. Para favorecer la fluidez del espacio, el proyecto plantea una serie de plataformas elevadas respecto a los restos arqueológicos y conectadas al nivel de la acera en los extremos invitando a ser recorrido a distintos niveles y siguiendo las curvas de nivel de la excavación, con cómodos y continuos planos inclinados.
Por otro lado se proponen también una serie de pasarelas peatonales que conectan las dos partes del barrio divididas por el cauce de Orgegia-Juncaret y con la playa, convirtiendo a la propuesta en el centro y punto de encuentro para los habitantes de la Albufereta.
Las plataformas elevadas son estructuras tensadas cuya forma curva está configurada por tubos de acero a los cuales se anclan los cables según la dirección de la retícula arqueológica actual, permitiendo así tener localizados los restos siguiendo unas coordenadas cartesianas. Para la cimentación se utilizan micropilotes limitando así las tensiones en el terreno.
La superficie pisable está compuesta por cubos desmontables, de madera en las zonas con mayor pendiente y que son utilizadas como graderío en los casos de realización de espectáculos, y de mimbre tejido en las zonas más planas.
El mimbre se teje de forma tridimensional alcanzando así la resistencia a flexión necesaria para poder caminar sobre ellos. Estas piezas prismáticas se encajan en la retícula y se fijan atornillándolos a las piezas metálicas que abrazan a los cables.
Los cubos suspendidos tienen unas dimensiones y peso reducidos de forma que los propios arqueólogos pueden desmontar las piezas para trabajar en el subsuelo y volver a reconfigurarlas adecuándose a los restos que vayan descubriendo. El hecho de que todos los procesos constructivos sean manuales evita la entrada de maquinaria.
En las zonas donde los restos arqueológicos son de interés para el visitante, aparecen espacios abovedados que permiten disfrutar contemplando de pie, sentado o tumbado, contribuyendo así a la interacción usuarios-ruinas.
El procedimiento constructivo consiste en formar una retícula de listones de madera húmeda fijada en los extremos del espacio a cubrir. Sobre la madera se colocan paneles de ecorresina con la posibilidad de contener elementos vegetales tales como flores u hojas entre las capas que lo forman suscitando a imaginar un entorno selvático.
Otro tipo de estructuras realizadas con el mismo sistema son las conchas programables. Éstas, proporcionan sombra, pero sus grandes dimensiones permiten su transformación en un lounge bar o una sala de conciertos al aire libre. Los tejidos mosaico bidimensionales de mimbre trepan por la madera creando un universo de sombras y el mobiliario necesario para diferentes situaciones de uso.
En la parte más alta del solar y culminando el recorrido entorno a las ruinas del poblado Ibérico, aparece la sala de exposiciones aportando al conjunto una imagen reconocible e identificable desde cualquiera de los recorridos de aproximación a la actuación.
Si bien históricamente las civilizaciones se han ido superponiendo unas a otras reutilizando y/o destruyendo la capa inferior, mi proyecto lo entiendo como una capa más sobre las actuales, pero en este caso no se apoya sino que se eleva respetando y protegiendo los restos que hay debajo, permitiendo el uso libre del espacio superior, contemporáneamente a la fácil accesibilidad del estrato inferior para los arqueólogos.
A pesar de ser un resultado académico, las puertas quedan abiertas para posteriores investigaciones en este tipo de sistemas aplicables a un problema aún no resuelto.
MI PROYECTO LO ENTIENDO COMO UNA CAPA MÁS SOBRE LAS ACTUALES, PERO EN ESTE CASO NO SE APOYA SINO QUE SE ELEVA RESPETANDO Y PROTEGIENDO LOS RESTOS QUE HAY DEBAJO
{gallery}Numero_2/Fotos_Laura_Gea{/gallery}
Vuelta al Índice